jueves, 27 de agosto de 2009
LARA BARBAGALLO: VIVIR PARA ACTUAR
Lara Barbagallo es considerada como una joven promesa del teatro fueguino. Con 24 años trabaja en el ámbito teatral desde los 14 años y actualmente forma a chicos y a grandes a través del taller de teatro que realiza en la Galería de Arte del Museo Marítimo los sábados de 16 a 19 horas para adolescentes, también para niños de 14 a 15 horas y para adultos los miércoles de 22 a 24 horas.
¿Cómo te iniciaste en el teatro?
Empecé a los 14 años en el taller de teatro para adolescentes de Pedro Romero hasta el día de hoy somos compañeros. Algunos de mis compañeros se quedaron en el camino pero yo no deje y hoy me estoy dedicando exclusivamente a esto haciendo otras cositas referidas al arte.
¿Cuál fue tu motivación para estar en el teatro?
De muy chica me di cuenta que quería esto. No quería dejarlo, sentía que era una pasión y no lo iba a dejar por nada.
¿Con 24 años a que aspiras?
Siempre trato de perfeccionarme con un montón de experiencias, como expresión corporal teatro de títeres, maquillajes. Me gusta mucho dirigir, actuar y a escribir.
¿Cuáles son tus modelos?
Mi modelo es Pedro Romero, que no solo es mi maestro sino que es mi compañero. Nunca me puse a pensar en referentes. En realidad nadie sabe nada, pero creo que yo crítico como tengo que hacerlo.
¿Cómo ves el teatro en Ushuaia?
Lo veo un poco pobre. Pero hay grupos, material para hacer obras. Si bien en nuestro grupo no hacemos tantas obras no por cuestiones de personajes sino por que después de hacer una obra todos se dispersan. Recordemos que en la ciudad no todos son actores, tienen sus trabajos, sus cosas.
¿Lo ves pobre en el sentido en que faltan actores ya que la mayoría lo hacen por hobby, entonces no lo encaminan para marcar un espacio mas fuerte en Ushuaia?
No solo eso, sino por que no hay tiempo entonces para animarse o terminar. Hay un montón de ideas registradas pero falta ponerlas en marcha.
¿Se rescatan personas o espacios que demuestran lo contrario?
Hay personas que viven de eso como yo, por que es nuestro oficio. Se mezclan con la gente que lo toman como hobby. Pero a la hora de trabajar es un compromiso. Aunque no vivimos de las obras ya que si viviéramos en otra parte habría más producción. Hay diferencias algunos lo toman como hobby, otros como profesión.
¿Estas formando chicos en la actuación?
A través del trabajo de Pedro Romero y Jesica Lomastro quien pone la cuota de danza hace tres años que soy profesora de teatro para adolescentes y adultos, mientras que las clases para niños las doy si me necesitan. Les doy más tiempo a los adolescentes.
Me especializo en los adolescentes por que me veo en ellos. Yo también empecé a esa edad. Para trabajar son más interesantes por que están en la etapa del todo vale. Entonces se puede jugar más al enseñarles. Mientras que con adultos se deforma la cuestión, ellos creen que jugar tiene otros sentidos. Con los niños con su inocencia juegan ya que se les enseña no a través de técnicas sino con juegos.
Ahora mismo es un grupo muy lindo estoy orgullosa por que hay compromiso de parte mía y recibís lo mismo.
¿Ves que ellos pueden hacer una profesión?
Nosotros preparamos actores, no es un curso. Pero hablamos con ellos y les decimos que acá no se pueden quedar si piensan trabajar en serio, ya sea en la televisión o en el cine. Lo nuestro es algo básico entonces no es convenientes quedarse si quieren desarrollarlo profesionalmente.
¿Ves unión entre las comunidades teatrales? ¿Ves roces entre ellas?
En realidad es una comunidad pero hay grupos. No creo que haya roces. Tenemos el mismo objetivo. Desde nuestra parte no los hay si los hay lo hacemos a un lado por que no es el objetivo, estamos para otra cosa. Cada uno esta en su tema preparando. A veces nos juntamos por que somos colegas.
¿Seguís pensando que cuando actúas sentís que no sos vos?
Cuando me nombras eso se pone la piel de gallina. Desde hoy hasta el último día de mi vida sigo pensando así. El teatro es maravilloso, es difícil de explicarlo pero a la vez es sencillo por la pasión que siento. Es difícil transmitirlo pero fácil demostrarlo en el escenario.
¿Qué se necesita para actuar?
Todos tienen acceso, pero necesitan compromiso desde quien enseña hasta quien aprende. Además de voluntad. No se tiene que tener resistencia a algo nuevo. En el teatro se trabaja con mundos diferentes donde se expresan emociones. Sobre todo es algo libre, hay libertad, aunque hay gente que se resiste a emocionarse a decir “Si”.
¿Y te sentís dispuesta a todo? ¿Estas lista para interpretar papeles muy comprometidos como un represor o una persona reprimida?
Ahora te podría decir que si, depende de la situación. Digo que si por que lo siento pero no lo puedo decidir en el momento de preparar el proyecto y trasladarlo en el escenario.
Me interesa todo papel que tenga que ver con hacer reflexionar al espectador, que pueda llegar a su casa y pensar en lo que vio no que quede en el viento el mensaje. Con temas fuertes el publico se resiste por que no quiere pensar quiere divertirse al vivir en crisis emocionales y económicas. Pero no es así, no se quiere poner mal al otro o peor; no estamos para eso, estamos para transmitir cosas diferentes.
¿Qué es ser artista?
Uno piensa que es para divertir o no se sabe. Esta para algo pero no solo para eso. De tomarlo o no es el tema.
¿Cómo te preparas al actuar?
Es algo íntimo. Te puedo decir que no es mucha ciencia ni tanto misterio. Me sale en el momento de salir a escena, en quince minutos antes de salir.
Es difícil meterse en un personaje, pero hay técnicas.
No tengo un ritual, lo que me interesa que no falten los compañeros, eso es mi rito. Tenerlos por que son muy buenas personas y compartir el momento. Aunque tengas que tener concertación en tu personaje, es muy fuerte es importante.
¿Al finalizar una obra sos de preguntar si “te gusto o no”?
La verdad no pregunto. Es amplio preguntar. A mi misma no me lo pregunto. Uno tiene que ensayar muchísimo para nos entirse inseguro en el momento. Cuando se esta preparado no tiene por que hacerse preguntas. Obviamente esta la autocrítica, la conclusión con tus compañeros donde te das cuentas de cosas. Pero es algo entre el grupo.
Tiene que salir del otro. Jamás decir lo que quisiste decir por que matas la imaginación del otro y es horrible.
No hay que decir todo, que valla a su casa y que piense, si fue aburrido, si se emociono o no.
Lo que quiero demostrar en el escenario es algo, con el personaje que tenga. Obviamente no soy yo pero el personaje no me atrapa. Quiero trasmitir, llegar a algo y si en el camino se corta, para mi fue un mal trabajo.
foto: gentileza de la artista
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario